La Superliga europea ha muerto. Apenas dos días después de nacer, los clubes ingleses que eran parte del proyecto lo dejaron en coma al anunciar su abandono. La estocada final ha llegado hoy con la claudicación italiana y española.
Real Madrid, Manchester United, Juventus, Barcelona, Liverpool, Manchester City, Inter de Milán, Atlético de Madrid, Chelsea, AC Milan, Arsenal y Tottenham lanzaron una guerra contra la UEFA y la FIFA pero no contaron con otros factores que decantarían rápidamente el resultado.
Quedaron, como suele decir el vocero mediático de Florentino Pérez, RETRARADOS.